¿Qué significan los números que aparecen en mi protector?
Los protectores solares son agentes que ayudan a prevenir que los rayos ultravioletas (UV) lleguen a la piel.
Existen 3 tipos de radiación ultravioleta, los rayos UVA, los rayos UVB y los rayos UVC, estos últimos no sobrepasan de la capa de ozono, por eso no los tomaremos en cuenta en este momento, sin embargo es importante conocer de su existencia ya que estos rayos no son compatibles con la vida humana. Es por esta razón que también es importantísimo cuidar nuestra capa de ozono.
Los rayos UVB
Son la principal causa de las quemaduras en la piel, estos sobrepasan la capa de ozono, y en cierta cantidad se reflejan en las nubes, por eso en un día nublado podemos no sentir esta sensación de picor de los rayos del sol, sin embargo un buen porcentaje de estos rayos logra atravesar hasta la superficie terrestre.
Los rayos UVA
Sobrepasan la capa de ozono, también las nubes, y penetran en la piel más profundamente. Estos rayos se asocian con las arrugas, manchas, la pérdida de la elasticidad y se considera la luz UVA como la causante principal del cáncer de piel.
Es por esto que los protectores solares deben protegernos contra los rayos UVA y UVB.
¿Qué es el FPS?
FPS significa Factor de Protección Solar, o también podés encontrarlo en inglés como SPF (Sun Protection Factor).
El FPS cumple una excelente función protegiéndonos contra los rayos UVB.
Este numerito que lo acompaña NO significa la cantidad de tiempo que debe pasar para volvernos a colocar protector solar. Este número significa la cantidad de veces adicionales que estamos protegidos del sol contra los rayos UVB.
Por ejemplo si decimos que un protector es FPS 5 significa que tenemos una protección 5 veces mayor, sin embargo esto NO ES LO MISMO a decir que estamos 5 veces TOTALMENTE protegidos.
Otra forma de verlo es en términos de porcentajes: un FPS 15 bloquea aproximadamente el 93% de todos los rayos UVB.
Un FPS 30 bloquea el 97%, y un FPS 50+ bloquea el 99%.
Pueden parecer diferencias insignificantes, pero si se tienen antecedentes de cáncer de piel, o pieles muy blancas o susceptibles, esos porcentajes hacen una gran diferencia. Y como podemos ver, no hay un protector solar que pueda bloquear todos los rayos UVB.
De esto es importante recordar que el enrojecimiento de la piel es una reacción a los rayos UVB y tiene poco que ver sobre el daño que los rayos UVA hacen.
¿Y los rayos UVA?
Los rayos UVA representan el 95% de la luz que llega a la tierra y es responsable por el envejecimiento cutáneo, bronceado de la piel, oscurecimiento y creación de manchas y lunares y del peligroso cáncer de piel.
Los protectores solares para que sean eficaces ocupan tener protección contra estos peligrosísimos rayos.
Cuando un protector dice que es de Amplio Espectro, es porque nos está protegiendo también contra los rayos UVA.
En algunos casos la palabra Amplio Espectro puede sustituirse con simbología, por ejemplo: en los países europeos puede verse un signo de UVA envuelto en un círculo, y en el caso de los protectores americanos se pueden ver unas cruces, estas 2 simbologías significan que tienen protección contra los rayos UVA.
Es importantísimo que te digamos que ningún protector solar continúa siendo eficaz después de 2 horas, es por esto que es importante reaplicarlo a lo largo del día.
¿Cuánto protector debo ponerme?
La mayoría de los protectores solares son químicos, NO físicos, esto significa que no es necesario que quede una capa blanca sobre la piel para que haga efecto. Sin embargo si es importante aplicarlo 30 minutos antes de la exposición al sol para que todos los ingredientes se absorban y hagan efecto en la piel.
Para asegurar una protección solar, es necesario aplicar 1 oz. (aproximadamente 1 cucharadita) por zona. Por ejemplo se ocupa 1 para rostro, otra para cada brazo, otra para espalda, otra para abdomen y 2 por cada pierna.
Los estudios muestran que la mayoría de las personas se aplican sólo la mitad o una cuarta parte de esa cantidad, eso significa que el FPS que tienen en su cuerpo es inferior a lo recomendado.
También es muy importante reaplicarlo en las mismas cantidades cada dos horas, o inmediatamente después de nadar, secarse con un paño, o después de sudar mucho.
